Nacido dos meses antes de la rendición de los nazis, el célebre artista alemán Anselm Kiefer creció entre los escombros de su patria, tanto reales como figurativos. La destrucción le sigue atrayendo e incluso deleitando, como demuestra Wim Wenders en su épico documental en 3D Anselm. El cineasta (un mes más joven que Kiefer) observa cómo el artista ataca sus enormes pinturas escultóricas con un soplete y las salpica con plomo fundido. Cerca de él se encuentra uno de sus muchos ayudantes, preparado con una manguera de agua. Fuente e imagen: https://www.infobae.com/